Dios en primer lugar
La correcta respuesta cristiana a las injusticias y los sufrimientos de la vida es tener paciencia y confianza en Dios. “¿Alguno de ustedes está pasando por dificultades? Que ore. ¿Alguno está feliz? Que cante alabanzas. ¿Alguno está enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia, para que vengan y que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor.” (Santiago 5:13–14, NTV)