Él fortalece al cansado y acrecienta las fuerzas del débil.
(Isaías 40:29)
¿Te sientes muy cansado todo el tiempo aunque te hayas acabado de levantar? Tal vez estés llegando al límite del cansancio conocido también como agotamiento o burnout. Pero aunque tu nivel de cansancio no llegue a ese extremo, todos necesitamos la fuerza del Señor para llevar las cargas de la vida.
Las dificultades, las decepciones y pérdidas de la vida, sumadas a los muchos quehaceres (el conocido corre-corre), sobrecargan nuestra vida. Todo lo que realmente necesitamos es estar seguros en las manos de Dios para vencer todo tipo de cansancio.
Un corito conocido dice en uno de sus versos: «Si el viaje es pesado y te cansas en el camino, toma la mano de Dios y continúa…»
Aférrate a Dios. Él te dará fuerzas y renovará tu ánimo.
- Tu cansancio y tu debilidad pueden ser transformados por el Señor, confía de todo corazón.
- Ora y entrega tu carga pesada a Jesús. Él anda contigo, está a tu lado y te sustenta.
- Cuidado con la avalancha de información que recibes. Limítala. Sin darte cuenta sobrecargas tu mente, tu corazón y tu cuerpo.
- Si te sientes cansado, Jesús te hace una invitación: lee Mateo 11:28-30 y medita en eso.
- ¡Aprende a descansar! Dios estipuló 1 día de descanso semanal porque sabe que lo necesitamos. ¡Obedece! Pasa tiempo con Dios, toma tiempo para adorar, descansar y divertirte. ¡Dios renovará tus fuerzas!
Para orar:
Señor mi Dios, ayúdame a encontrar fuerzas en ti y en tu Palabra. Tantas luchas, dolores y preocupaciones día tras día me dejan cansado y débil. ¡Pero yo confío en ti! Vengo a ti, Señor Jesús, dame alivio y vigor. Quiero aferrarme a tus manos en este día y caminar por fe con tu fuerza. Amén.